La Asociación Americana de Psiquiatría clasifica el trastorno de pánico como uno de los trastornos de ansiedad, que tiene por características ataques de pánico recurrentes, seguidos de una persistente preocupación con ataques adicionales y alteraciones de comportamiento.
Pensando “en que hacer” delante de un diagnostico como ese, podemos presentar aquí algunos caminos, no únicos, pero que pueden ayudarte tanto en el enfrentamiento de la enfermedad, como en la búsqueda de alternativas practicas de acción delante de un ataque de pánico, cuadro común a los portadores de esta enfermedad.
Si presentas señales y síntomas de este trastorno, la primera cosa que debe ser hecha es pedir ayuda. Por más simple que pueda parecer, no intentes solucionarlo solo. Como en cualquier otra enfermedad, el sufrimiento mental debe ser llevado en serio y necesita de un seguimiento profesional. También como en cualquier otro problema de salud, cuanto antes se encuentre ayuda, mejores y mayores serán las oportunidades en el tratamiento. El acompañamiento con medico especialista, la psicoterapia y la medicación adecuada son alguna de las herramientas imprescindibles para quien sufre de trastorno de pánico.
¿Y si te ocurre a ti un ataque de pánico?
Ataques agudos de ansiedad intensa, asociados a síntomas como palpitaciones, corazón acelerado, sudor, temblores, sensaciones de sofocación, dolor en el pecho, mareos, escalofríos, olas de calor y otros pueden ocurrir. En este momento, es importante tener la consciencia de tu cuadro de salud, porque, aún cuando la mayor parte de las sensaciones sean inevitables, tu posicionamiento delante de la crisis puede tener una respuesta muy diferente y positiva.
Acciones aparentemente simples pueden ayudar: buscar, en la medida del posible, un lugar en que te sientas más seguro y calmo; controlar la respiración, cerrando los ojos preferentemente; intentar mantener la serenidad lo máximo que se pueda, pensar en cosas buenas, recordar que la incomodidad va pasar rápidamente. La meditación y reflexión tiene un valor inmenso, y la oración puede ser muy eficaz para el restablecimiento de la serenidad perdida durante el ataque de pánico.
Busca ayuda
Por último, recuerda una vez más que no estas solo en este camino. El tratamiento para el trastorno de pánico existe y tu puedes mejorar mucho si lo aceptas con responsabilidad.
Déjate ayudar y ayuda a otros que sufren por no solicitar auxilio.
fuente: Portal Canción Nueva
Foto Wesley Almeida/Canção Nova
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