Debemos tener cuidado para no ser esclavos de nuestras emociones
Lo que Jesús dijo a aquel hombre, nos lo dice a nosotros hoy: «Ponte de pie y colócate aquí en medio.» (Mc 3,1) Ese hombre habrá tenido muchos complejos. Sin embargo, Jesús le pidió que se colocara en el medio. No sé dónde, en que momento o lugar, la sequedad se fue apoderando de tu vida, pero hoy el Señor te dice: “Extiende tu mano para que yo te pueda curar”. El Señor no nos quiere secos, Él nos quiere salvar.
Nuestro Papa Emérito, Benedicto XVI, dice que la sanación más perfecta es la sanación del corazón. Cuántos están caminando, pero son prisioneros de sus propios pecados, prisioneros de sentimientos dolorosos guardados que despiertan odio y enfermedad. Cuántas personas esclavas de sus propios sentimientos.
Nosotros somos hijos amados por Dios, por eso, necesitamos dejarnos curar en nuestros sentimientos: el abandono de nuestros padres, desprecio en la escuela, abuso sexual. Dejarnos curar de las palabras malditas que lanzaron sobre nosotros.
Tenemos muchas heridas porque sufrimos por situaciones del pasado
Los sentimientos y emociones más fuertes comienzan a alterar incluso nuestro físico. Las enfermedades psicosomáticas, como son algunas enfermedades respiratorias, lupus, vitíligo, entre otras, son consecuencias de un desorden emocional.
El Señor quiere sanar nuestras emociones. A veces no existen cadenas que nos aprisionen, pero somos prisioneros de los vicios: novelas, bebida, sexo, cigarrillo, palabras, mentiras, críticas, remedios. Todo en exceso se vuelve de tal modo esclavizante que nos sensibilizan y nos disminuyen como persona.
Solo Dios puede darnos una mejoría y la sanación. Tú y yo necesitamos ser libres. Lo que nos hace prisioneros no son las cosas, ni los muros, ni las cadenas, sino la falta de una llave. Y Jesús es la llave, la llave del perdón y de la sanación, que abre nuestro corazón para el amor.
Hermana Maria Eunice
Misionera de la Comunidad Canción Nueva
Campamento de Sanación y Liberación
Fuente: Portal Canción Nueva.
Foto: Daniel Mafra/cancionnueva.com.es
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