martes, 18 de junio de 2024
Como yo os he amado
lunes, 17 de junio de 2024
¿Cómo saber si tengo caridad?
Le contestaré: Si el alma encuentra en ella misma las condiciones que hemos reconocido en la caridad. Se resumen todas en dos principales. Primero, la verdadera y santa paciencia que soporta todas las injurias pequeñas o grandes, de cualquier lugar que provengan, soportándolas con espíritu calmo y tranquilo. Luego, el celo para aliviar las necesidades del prójimo tanto como fuera posible. Así, la primera condición de la caridades soportar las injurias, la segunda condición es dar. ¿Qué dar? El afecto de la caridad, amando al prójimo como a sí mismos y asistiendo a las criaturas según la gracia y dones espirituales y temporales que ofrece Dios. Entonces el alma se encuentra dispuesta a tomar y gustar la palabra de Dios, aplicándose a observarla hasta la muerte. Existen otros signos de la caridad, pero no quiero extenderme demasiado y cito sólo los dos principales.
¡Qué feliz es el alma que se nutre en el seno de una tan tierna madre! Ella es humilde, obediente, preferiría morir a no ser sumisa a Jesús crucificado.
Santa Catalina de Siena (1347-1380)terciaria dominica, doctora de la Iglesia, copatrona de Europa
Carta 42 al rey Luis de Hungría (Lettres, I, Téqui, 1976)
REFRESCAR LLA VIDA DE FE
sábado, 15 de junio de 2024
RESONAR DE LA PALABRA
Lo que Jesús nos pide es que a nuestras falsedades y engaños, en muchas ocasiones autoengaños, no añadamos la ofensa de poner como testigo el santo nombre de Dios. El nos promete que conoceremos la verdad, que él mismo es la Verdad. Si “andamos en verdad” como pedía Santa Teresa a sus monjas, bastará con el sí y el no.
No juren
Leyendo este pasaje evangélico, vemos cómo Jesús insiste en la sencillez y en la verdad. Un seguidor de Jesús cuando afirma algo, tiene la fuerza de su afirmación, la fuerza de decir la verdad. No hay que invocar al cielo, a la tierra, a Jerusalén… ni a otra posible realidad. “A ustedes les basta decir sí o no. Lo que pasa de ahí viene del Maligno”. Porque un seguidor de Jesús no puede mentir.
Pero como bien sabemos, la iglesia, en sus diversos estamentos, exige, en ciertos casos, jurar por Dios, como si la palabra del cristiano no fuera suficiente. Hagamos caso a Jesús, el que es la Verdad, que nuestras palabras sean siempre verdaderas.
En el ámbito cristiano hay otra manera de ir en contra de lo que nos manda Jesús de decir siempre la verdad. Es lo que conocemos como mentiras piadosas. Que es algo así como mentir para defender una verdad. Nunca una mentira puede ser piadosa, nunca un cristiano puede mentir. Ha de vivir y decir siempre la verdad sabiendo que intenta seguir a Cristo que es la Verdad.
Fray Manuel Santos Sánchez O.P.
jueves, 13 de junio de 2024
Amar a nuestros enemigos, ¿es esto posible?
Hoy en día, no muchos quieren oír que todos somos pecadores y necesitamos salvación. Por eso la cruz es tanto escándalo porque allí el Hijo de Dios muere por nuestros pecados. Somos más pecadores y imperfectos en nosotros mismos de lo que jamás nos atrevemos a creer, pero al mismo tiempo somos más amados y aceptados en Jesucristo de lo que jamás podríamos atrevernos a esperar.
Entonces, ¿estamos dispuestos a amar a quienes nos persiguen? Unos 90.000 cristianos fueron martirizados por su fe este año. Uno moría cada seis minutos.
En el mundo de hoy escuchamos cómo se difama a la iglesia y a los cristianos. En cuestiones culturales y morales acaloradamente debatidas (aborto, eutanasia, matrimonio entre personas del mismo sexo, anticoncepción, pena de muerte), la iglesia es vista como una barrera. Entonces nuevamente pregunto: ¿Tienes enemigos?
Amarlos no significa nunca oponernos a ellos, pero lo hacemos de manera que demostremos cuidado e interés genuinos, sin ánimo de venganza.
Jesús nos dice que “pongamos la otra mejilla”. Esto muestra nuestra apertura a reconciliarnos con quienes se nos oponen, a iniciar una relación sobre una nueva base de justicia y amor.
Este enfoque requiere decir la verdad con amor. El amor sin verdad es sentimentalismo; nos apoya y afirma, pero mantiene a la gente en negación sobre los efectos dañinos del pecado. La verdad sin amor, por otra parte, es dura y a menudo meramente crítica. Puede brindar información verdadera, pero de una manera que otros no pueden soportar escuchar.
Decir la verdad con amor genuino puede ser un desafío. Pero Jesús nos insta a amar a nuestros enemigos y a orar por quienes nos persiguen, para que todos seamos hijos de nuestro Padre Celestial.
Jesús partió el pan con quienes luego lo llevaron a la muerte y lo traicionaron. Tuvo comunión con amigos que se convirtieron en enemigos.
¿Podemos compartir el pan con nuestros enemigos? Solos no podemos perdonar y amar como deberíamos pero por eso Jesús murió en la cruz. Con él podemos verdaderamente desear que nuestros enemigos sean perdonados y sanados junto con nosotros.
¿Cómo empezar? Empieza por decir los nombres de aquellos a quienes le cuesta amar. Haga esto antes de recibir el pan de vida y, sí, la copa de la salvación.
Las dificultades del amor
lunes, 3 de junio de 2024
COMPRENDIENDO LA PALABRA
RESONAR DE LA PALABRA - Evangelio según San Marcos 12,1-12
Jesús se puso a hablarles en parábolas: "Un hombre plantó una viña, la cercó, cavó un lagar y construyó una torre de vigilancia. Después la arrendó a unos viñadores y se fue al extranjero.A su debido tiempo, envió a un servidor para percibir de los viñadores la parte de los frutos que le correspondía.Pero ellos lo tomaron, lo golpearon y lo echaron con las manos vacías.De nuevo les envió a otro servidor, y a este también lo maltrataron y lo llenaron de ultrajes.Envió a un tercero, y a este lo mataron. Y también golpearon o mataron a muchos otros.Todavía le quedaba alguien, su hijo, a quien quería mucho, y lo mandó en último término, pensando: 'Respetarán a mi hijo'.Pero los viñadores se dijeron: 'Este es el heredero: vamos a matarlo y la herencia será nuestra'.Y apoderándose de él, lo mataron y lo arrojaron fuera de la viña.¿Qué hará el dueño de la viña? Vendrá, acabará con los viñadores y entregará la viña a otros.¿No han leído este pasaje de la Escritura: La piedra que los constructores rechazaron ha llegado a ser la piedra angular:esta es la obra del Señor, admirable a nuestros ojos?".Entonces buscaban la manera de detener a Jesús, porque comprendían que esta parábola la había dicho por ellos, pero tenían miedo de la multitud. Y dejándolo, se fueron.
fuente del comentario CIUDAD REDONDA
domingo, 2 de junio de 2024
COMPRENDIENDO LA PALABRA
RESONAR DE LA PALABRA - Evangelio según San Marcos 14,12-16.22-26.
El primer día de la fiesta de los panes Acimos, cuando se inmolaba la víctima pascual, los discípulos dijeron a Jesús: "¿Dónde quieres que vayamos a prepararte la comida pascual?".El envió a dos de sus discípulos, diciéndoles: "Vayan a la ciudad; allí se encontrarán con un hombre que lleva un cántaro de agua. Síganlo,y díganle al dueño de la casa donde entre: El Maestro dice: '¿Dónde está mi sala, en la que voy a comer el cordero pascual con mis discípulos?'.El les mostrará en el piso alto una pieza grande, arreglada con almohadones y ya dispuesta; prepárennos allí lo necesario".Los discípulos partieron y, al llegar a la ciudad, encontraron todo como Jesús les había dicho y prepararon la Pascua.Mientras comían, Jesús tomó el pan, pronunció la bendición, lo partió y lo dio a sus discípulos, diciendo: "Tomen, esto es mi Cuerpo".Después tomó una copa, dio gracias y se la entregó, y todos bebieron de ella.Y les dijo: "Esta es mi Sangre, la Sangre de la Alianza, que se derrama por muchos.Les aseguro que no beberé más del fruto de la vid hasta el día en que beba el vino nuevo en el Reino de Dios".Después del canto de los Salmos, salieron hacia el monte de los Olivos.
fuente del comentario CIUDAD REDONDA
sábado, 1 de junio de 2024
COMPRENDIENDO LA PALABRA
RESONAR DE LA PALABRA - Evangelio según San Marcos 11,27-33
Y llegaron de nuevo a Jerusalén. Mientras Jesús caminaba por el Templo, los sumos sacerdotes, los escribas y los ancianos se acercaron a ély le dijeron: "¿Con qué autoridad haces estas cosas? ¿O quién te dio autoridad para hacerlo?".Jesús les respondió: "Yo también quiero hacerles una sola pregunta. Si me responden, les diré con qué autoridad hago estas cosas.Díganme: el bautismo de Juan, ¿venía del cielo o de los hombres?".Ellos se hacían este razonamiento: "Si contestamos: 'Del cielo', él nos dirá: '¿Por qué no creyeron en él?'.¿Diremos entonces: "De los hombres'?". Pero como temían al pueblo, porque todos consideraban que Juan había sido realmente un profeta,respondieron a Jesús: "No sabemos". Y él les respondió: "Yo tampoco les diré con qué autoridad hago estas cosas".
fuente del comentario CIUDAD REDONDA