A- Ritos introductorios
1- Invocación Trinitaria:
+ En el nombre del Padre, + del Hijo + y del Espíritu Santo.
Todos: ¡AMÉN!
• Guía: Dios, ven en nuestro auxilio
• Todos: Señor, socórrenos y sálvanos
• Guía: Gloria al Padre, al Hijo y al Espíritu Santo
• Todos: Como era en el principio, ahora y siempre por los siglos de los siglos. ¡Amén!
OREMOS
Dios misericordioso y omnipotente, que concediste a tu hija Elena Guerra la gracia de la beatitud: concédenos, te suplicamos, que por la observancia de sus enseñanzas acerca de la devoción al Espíritu Santo podamos, por la participación en esta Novena, ser conducidos por el Consolador a una mayor comunión con tu Hijo amado, nuestro Salvador Jesucristo, por cuya pasión, muerte y resurrección te adoramos y glorificamos. Por el mismo Cristo, nuestro Señor.
Todos: ¡Amén!
B- Propio de cada día
NOVENO DÍA
LECTURA ORANTE DE LA PALABRA DE DIOS
Lectura
del Libro de los Hechos de los Apóstoles
“Cuando los apóstoles que estaban en Jerusalén tuvieron noticia de que los samaritanos habían aceptado la Palabra de Dios, les enviaron a Pedro y a Juan. Bajaron y oraron por ellos para que recibieran el Espíritu Santo, ya que todavía no había descendido sobre ninguno de ellos y solo habían sido bautizados en el nombre del Señor Jesús. Pero entonces les impusieron las manos y recibieron el Espíritu Santo”.(He 8, 14-17).
EL SIGNIFICADO DE LA EFUSIÓN DEL ESPÍRITU SANTO
(Raniero Cantalamessa)
“Este es el sentido de la efusión del Espíritu. Es una respuesta de Dios a la disfunción en que se encontró la vida cristiana. En estos últimos años se sabe que la Iglesia y sus obispos comenzaron también a preocuparse con el hecho de que los sacramentos cristianos, principalmente el bautismo, son administrados a personas que después no lo practican en la vida, y pensaron que el bautismo no debería administrarse si no hay garantías mínimas de que sea cultivado y valorado por el niño. De hecho, no se puede ‘echar perlas a los chanchos’, como decía Jesús, y el bautismo es una perla, porque es fruto de la Sangre de Cristo. Pero, se diría que Dios se preocupó mucho antes que la Iglesia, de esa disfunción y, por eso despertó en ella, movimientos que tienden a renovar en los adultos la iniciación cristiana.
La Renovación Carismática es uno de esos movimientos, y en ella está sin duda la gracia principal unida a la efusión del Espíritu y a lo que la precede. Su eficacia en la reactivación del bautismo consiste en esto: definitivamente, el hombre trae su parte, es decir, elige su fe, preparada por el arrepentimiento, que permite a la obra de Dios liberarse y liberar toda su fuerza. Es como si la mano de Dios extendida encontrase finalmente al hombre y, en el apretón de manos, le pase toda su fuerza creadora que es el Espíritu Santo. También viene a ser como una imagen sacada del mundo físico en donde el enchufe es como si estuviese unido a un circuito eléctrico y se encendiera la luz. El don de Dios es ‘liberado’ y el Espíritu se irradia como un perfume sobre la vida cristiana”.
(“La poderosa unción del Espíritu”. Editora Raboni, 1998, Campinas, SP, pág. 45 y 46).
OREMOS (Todos):
RENACER
(Beata Elena Guerra)
Jesús, te pido renacer; pero, renacer de lo alto.
Te pido rebautizarme y renovarme en tu Espíritu.
Que él sea siempre la inspiración de mis pensamientos,
el estímulo de mi voluntad, el centro de mis afectos,
el guía de mis palabras, el sostén de mi esperanza,
el motivo y el fin de mis acciones, el amigo de mi corazón,
el compañero de mi vida, mi consuelo en la muerte,
mi tesoro para la eternidad.
Que mi vida sea un incesante renacer y crecer en el Espíritu,
que todo sea Amor en mí.
Que la fe, sea el Amor que espera.
Que la adoración, sea el Amor que se postra.
Que la oración, sea el Amor que te encuentra.
Que el cansancio, sea el Amor que trabaja.
Que la mortificación, sea el Amor que se inmola.
Que solamente tu Amor, oh Dios, guíe mis pensamientos,
mis palabras y mis acciones. ¡Amén!
C- ORACIONES FINALES (para todos los días)
ORACIÓN AL ESPÍRITU SANTO
“Amado Espíritu de Dios, que fuiste comunicado a la Beata Elena con la abundancia de tus dones, y le confiaste el mensaje del perenne renovarse de tu Pentecostés, por la docilidad y fidelidad a la misión que le fue confiada, te pedimos volverla, aún hoy, testigo de tu amor, atendiendo a nuestra oración por… (intención personal de oración por una gracia) Reaviva, Dios Consolador, nuestra fe y nuestra esperanza, para que podamos caminar con valor sereno rumbo al encuentro definitivo. Amén.”
Guía: Beata Elena Guerra
Todos: Ruega por nosotros.
ACTO DE DESEO Y OFRECIMIENTO (Beata Elena Guerra)
Guía: Dios del bello Amor, Tú nos llamaste cerca de ti, porque tu alegría es estar entre los hijos de los hombres. Nos unimos a Ti como a la fuente de la santidad.
Todos: Espíritu Santo, santifícanos.
Guía: Venimos a ti como ciegos a la luz eterna y al dador de la luz.
Todos: Espíritu Santo, ilumínanos.
Guía: Venimos a ti como mendigos al don supremo y al dador de dones.
Todos: Espíritu Santo, escúchanos.
Guía: Venimos a ti como sedientos a las aguas de la vida.
Todos: Espíritu Santo, sácianos.
Guía: Venimos a ti como pobres al padre de los pobres.
Todos: Espíritu Santo, ten piedad de nosotros.
Guía:
Ten piedad de nosotros, oh Espíritu Santo y ven a nosotros. He aquí que te ofrecemos nuestro cuerpo con sus sentidos, nuestra alma con sus facultades, nuestro corazón con sus sentimientos. Te entregamos nuestros pensamientos y deseos, palabras y acciones, alegrías y pesares, vida y muerte.
Todos: Espíritu Santo, soy tuyo y tuyo quiero ser ahora y siempre. Amén.
ORACIÓN Y BENDICIÓN FINAL
Guía: Pidamos, hermanos y hermanas, la intercesión de la bienaventurada Virgen María, para que, a ejemplo de ella, acojamos con toda la apertura de nuestro corazón la Persona divina del Espíritu Santo, y busquemos incesantemente su plenitud:
Todos: Dios te salve María, llena eres de gracia….
Todos:
“Oh Dios, que santificaste a tu Iglesia entera
en todos los pueblos y naciones,
derrama por toda la extensión del mundo
los dones del Espíritu Santo
y haz en el corazón de los fieles
las maravillas que obraste
al inicio de la predicación del Evangelio.
Por nuestro Señor Jesucristo, tu Hijo,
en la unidad del Espíritu Santo. ¡Amén!
Guía: Bendícenos oh Dios Todopoderoso, todo amoroso: Padre, Hijo y Espíritu Santo.
Todos: ¡Amén!
Guía: Alabado sea Jesucristo.
Todos: ¡Por siempre sea alabado!
No hay comentarios:
Publicar un comentario