Para todo existe un tiempo
¡Debajo el cielo existe un tiempo para cada cosa, hay un momento para que suceda cada detalle! Poco a poco, la historia de nuestra vida está siendo tejida no solo con la consonancia de cada día, sino también con sus disonancias!
En cada accidente, en cada pausa, la música que somos se va componiendo con la seguridad de ser la primera y la ultima, la única, la más bella y especial. Por ser únicos y especiales a los ojos de Dios, no podemos dejar que nada ni nadie robe la seguridad de ser amados y cuidados por el Padre.
Muchos, hoy, se martirizan y quedan rumiando cosas que vivieron en el pasado, situaciones del pecado, peleas, malentendidos y situaciones que insisten en aflorar todo que esta en su corazón. Mientras no cortemos el cordón umbilical con nuestro pasado, no podremos conseguir vivir bien nuestro presente.
Experimenta, a partir de hoy, pedir a Dios que sane su pasado, sus resentimientos, traumas y miedos.
¡El Señor te hizo para ser libre y para ser feliz! Hoy, el Señor te quiere liberar de todo lo que te hace llorar y quiere darte un nuevo ánimo para proseguir sin mirar para atrás.
Haz éste propósito con Dios y pide en oración:
“Señor Jesús, yo te doy libre acceso a mi pasado para que puedas sanarme y hacerme hombre nuevo, Señor! “No quiero más estar preso de lo que ya pasó, porque mi pasado no es más grande que los planes que tienes para mí.”
“Señor Jesús, yo te doy libre acceso a mi pasado para que puedas sanarme y hacerme hombre nuevo, Señor! “No quiero más estar preso de lo que ya pasó, porque mi pasado no es más grande que los planes que tienes para mí.”
Hoy, es el tiempo de la gracia.
Ahora es el momento de declarar: “¡Hoy, soy libre!”.
¡La mejor receta para ser feliz es vivir el hoy bien en la presencia del Señor!
Ahora es el momento de declarar: “¡Hoy, soy libre!”.
¡La mejor receta para ser feliz es vivir el hoy bien en la presencia del Señor!
¡Dios te bendiga!
Por: Vagne Bittencourtt
Traducción: Thaís Rufino de Azevedo
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