Cada día que despertamos, necesitamos extraer para nuestra vida una novedad, un nueva enseñanza, una nueva forma de vivir, de actuar, de relacionarse. Esto da sabor de entusiasmo para seguir adelante.
El ambiente, las personas y las situaciones pueden ser las mismas, pero nuestro interior necesita ser diferente, para responder a cada situación de una manera diferente.
Solamente el Espíritu Santo puede hacer que hagamos esa experiencia, porque “lo antiguo ha desaparecido, un ser nuevo se ha hecho presente” (2 Cor 5-17), y todo aquel que está en Cristo Jesús es una criatura nueva.
¿Nos abrirnos hoy a las novedades del Espíritu Santo?
Pidamos a Jesús que envíe sobre nosotros su Espíritu Santo para renovarnos.
Recemos: ¡Envíanos, Señor, tu Espíritu Santo!
¡Jesús, yo confío en ti!
Luzia Santiago
Cofundadora de la Comunidad Canción Nueva
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