Es necesario confesar nuestros pecados para que seamos perdonados.
El inicio del proceso de la confesión de los pecados está en reconocer nuestras faltas. Lamentablemente nos es dificil reconocer nuestros pecados. Damos muchas excusas, otras veces nos da vergüenza, tenemos miedo de contar nuestras fallas.
Confesar significa colocar a la luz, dar testimonio, reconocer nuestras faltas.
Cuando reconocemos nuestros errores y nos arrepentimos de ellos, la misericordia del Padre nos alcanza
¡Dios te bendiga!
Monseñor Jonas Abib
fuente Portal Canción Nueva
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