jueves, 19 de mayo de 2016

¿Qué es la autoestima y cómo la mejoro?


La autoestima es el sentimiento valorativo de nuestro ser, de nuestra manera de ser, de quienes somos nosotros, del conjunto de rasgos corporales, mentales y espirituales que configuran nuestra personalidad. Esta se aprende, cambia y la podemos mejorar. Es el concepto que tenemos de nuestra valía y se basa en todos los pensamientos, sentimientos, sensaciones y experiencias que sobre nosotros mismos hemos ido recogiendo durante nuestra vida.

Este concepto de la autoestima ha sido muy trabajado en los últimos años, existe una amplia bibliografía acerca de cómo desarrollar tu autoestima, libros de autoayuda, artículos, etc., pero muchos de ellos están basados en una visión errada de quiénes somos realmente, se nos dice que debemos amarnos por lo que somos y no por lo que hacemos, y esto es verdad, pero muchas veces hay un desconocimiento de quiénes somos, entonces como amar lo que no se conoce. No se trata de amarnos a nosotros mismos sólo a causa de nuestras cualidades, sino sobre todo a causa de lo mucho que Dios nos ama. Si aceptamos el Amor que Dios nos brinda, recibimos la mayor dignidad imaginable: la dignidad de hijos de Dios. Ahora bien, ese recto amor a uno mismo resulta ser el modo más eficaz de combatir el egoísmo del yo, las actitudes narcisistas que nos llevan a creernos merecedores de nuestros derechos, cuando en realidad todo lo que somos es un don gratuitamente dado, inmerecido.

El reconocernos amados por el Señor permite que podamos descubrir nuestra dignidad de hijos de Dios más allá de nuestras debilidades, defectos, problemas, dificultades, esto es lo que nos permitirá aceptarnos y amarnos tal cual somos a nivel físico, psicológico y espiritual, aprendiendo a tener una sana relación con nosotros mismos, confiando en lo que somos capaces de realizar, pues nuestra confianza y seguridad vienen de Dios. Sólo así, sabiéndonos tan amados, nos amamos a nosotros mismos y podemos experimentar la felicidad de amar a los demás de un modo cada vez más libre y desinteresado. Esa seguridad de saber en qué radica nuestra valoración y amor, es lo que nos lleva a valorar y a amar a los demás, en su propia dignidad.

autora Victoria E Vazquez
Portal de Psicólogos católicos

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