martes, 16 de enero de 2018

Bienaventurados

«Felices aquellos que son capaces de ensuciarse las manos y trabajar para que otros vivan en paz. Felices aquellos que se esfuerzan por no sembrar división. De esta manera, la bienaventuranza nos hace artífices de paz; nos invita a comprometernos para que el espíritu de la reconciliación gane espacio entre nosotros. ¿Quieres dicha? ¿Quieres felicidad? Felices los que trabajan para que otros puedan tener una vida dichosa…. No puedo dejar de evocar a ese gran pastor que tuvo Santiago cuando en un Te Deum decía: «“Si quieres la paz, trabaja por la justicia”... Y si alguien nos pregunta: “¿qué es la justicia?” o si acaso consiste solamente en “no robar”, le diremos que existe otra justicia: la que exige que cada hombre sea tratado como hombre»
(Card. Raúl Silva Henríquez, Homilía en el Te Deum Ecuménico, 18 septiembre 1977)»


No hay comentarios:

Publicar un comentario