Pasos que cooperan a la sanación de los dolores y enfermedades
PEDIR AL PADRE EN NOMBRE DE JESÚS
El Padre de los cielos quiso que nuestra oración llegase a El en nombre de su hijo. Por lo tanto, Jesús no es solamente el camino seguro al corazón de Dios, sino es también el único camino. Su Nombre es fuente de sanación (cfr. Hech 4,30) dado a nosotros para la salvación de todos los que lo invocan (cfr. Rom 10,13). Jesús garantiza que el Padre jamás dejará de atender a esta súplica: “En verdad, en verdad les digo: si pidieran al Padre alguna cosa en mi nombre, Él se los dará. Hasta ahora, no pidieron nada en mi nombre. Pidan y recibirán, para que su alegría sea completa” (Jn 16, 23-24) Recurramos al Padre en nombre de Jesús, en el poder del Espíritu Santo. Y el Padre, por las manos de su Hijo, nos cura, nos salva y nos libera.
Es una oración muy simple y poderosa repetir con fe el nombre del Señor. Quien llama por el nombre de Jesús, siempre que lo haga lleno de Espíritu Santo, estará pidiendo a Dios que lo cure y lo salve.
“Pasos para la sanación y liberación completa” – Editorial Canción Nueva
Adaptación del original en portugués
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