Hoy, la Iglesia conmemora la solemnidad del Sagrado Corazón de Jesús. San Alfonso María de Ligorio afirma que “La devoción al Corazón de Jesús es la más bella y la más sólida del Cristianismo”
El Señor declaró a Santa Margarida Alacoque: “He aquí el Corazón que tanto ha amado a los hombres y les acumuló de beneficios y en respuesta a su amor definitivo en vez de gratitud encuentra olvido, frialdad y desprecio”.
El papa León XIII consagró el mundo al Sagrado Corazón de Jesús, así como varios otros Sumos Pontífices que de varias formas se manifestaron a favor de esta devoción la cual se resume en la consagración a él y en la reparación de los ultrajes que son hechos al Señor. Nuestro querido San Juan Pablo II, en 1980, también nos convocó para una adhesión profunda a esa devoción.
Entre los documentos y escritos sobre ese tema encontramos la Encíclica de Pio XII, “Haurietis aquas”, del 15 de Mayo de 1956. En ella, el Pontífice resalta que el mismo Jesús, que toma la iniciativa de presentarnos Su corazón como fuente de restauración y de paz: “Vengan a mí todos los que están cansados y oprimidos, que yo los aliviaré. Tomen mi yugo y aprendan de mi porque soy manso y humilde de corazón y encontrarán descanso para vuestro espíritu. Pues mi yugo es suave y mi fardo es leve (Mt 11, 28-30)”.
Que el Corazón de Cristo sea nuestro refugio. ¡Amén!
Su hermano,
Monseñor Jonas Abib
Fundador da Comunidade Canção Nova
Fundador da Comunidade Canção Nova
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