Gotas de sanación interior

Entre los días 26 al 28 de abril tiene lugar en la sede de la Comunidad Canción Nueva, en Cachoeira Paulista (San Pablo), el campamento “Curados para Amar” cuyo tema es “Gotas de Sanación interior”

Bien sabemos que la sanación interior es un proceso que depende de la disposición de cada persona para el alcance completo de la sanación. Es indispensable tener buenas actitudes, buscando una vida de perdón y de vivencia en el amor.

El P. Leo, en uno de sus libros, aborda pequeñas actitudes que, si fuesen vividas, podrían llevarnos a grandes sanaciones.

GOTEO DIARIO
La sanación interior, mucho más que un objetivo a ser alcanzado o una meta a ser conquistada es la consecuencia de nuestra manera de vivir. La “sanación interior” es un fruto, precisa ser cultivada.

CELEBRE PEQUEÑAS CONQUISTAS Y SABOREE GRANDES VICTORIAS.
En la vida necesitamos aprender a celebrar victorias, pequeñas y grandes. Cada paso vivido precisa ser gustado, saboreado, festejado. No podemos quedarnos esperando para celebrar solamente las grandes victorias.

PESIMISMO, ¡NO!
El pesimismo del mundo moderno acaba contaminando nuestro corazón. Nos vamos volviendo especialistas en resaltar lo negativo, pues lo alimentamos por medio de las noticias y de las conversaciones. La celebración de cada etapa vivida y conquistada nos ayuda en este proceso.

VICTORIA CELEBRADA ES SEMILLA DE NUESTRAS VICTORIAS.
 La celebración de las conquistas tiene también un aspecto muy importante que necesita ser resaltado cada vez más: aprender a compartir nuestros triunfos.
 La victoria que no es compartida no debe ser llamada “victoria”.

¡CREE EN LA FELICIDAD!
 Feliz aquel que tiene con quien compartir sus tristezas y dolores. Pero más feliz todavía aquel que tiene con quien compartir sus alegrías. El amigo verdadero es aquella persona delante de quien podemos revelarnos por entero. Como vivimos en una constante competición parece que ser feliz ofender a los otros.

¡COMPARTA LA VIDA!
 Un corazón curado sabe que la alegría verdadera no esta en aquello que tenemos o conquistamos, sino en la calidad de nuestras relaciones. Lo que no puede ser compartido no merece ocupar lugar alguno en nuestra vida.

REIR ES EL MEJOR REMEDIO
Para compartir la felicidad es preciso optar por la alegría. El gran pecado es no saborear la vida. Quien aprendió a sonreír sabrá llorar en la hora cierta, delante de las personas y las situaciones adecuadas.

¡DISCULPEME, YO ME EQUIVOQUÉ!
Reconocer los errores es un secreto esencial. Nadie está obligado a acertar siempre. Infeliz de quien, por orgullo, queda fijo en una idea aún sabiendo que está errada. Si sabemos que estamos equivocados, nada más noble y sanador que aceptar y aceptarse y comenzar de nuevo, de la manera correcta.

APRENDE A LIDIAR CON TUS ERRORES.
Nunca te vuelvas víctima de los acontecimientos. Es necesario ser tolerante con uno mismo y con los otros para no vivir aborrecido por cosas insignificantes. Es terrible cuando la persona vive masticando críticas.

¡SÉ FLEXIBLE!
La flexibilidad es una gota esencial para la copa de la sanación interior. Es preciso estar abierto a los cambios. Aún cuando sea muy difícil superar viejos hábitos o actitudes, es preciso esforzarse. El ser humano precisa crecer siempre, multiplicando sus dones y sus talentos. Quien no multiplica sus dones acaba perdiéndolos.

Fuente: Portal www.cancaonova.com
Adaptación y traducción del original en portugués