lunes, 2 de septiembre de 2019

COMPRENDIENDO LA PALABRA 020919


Por la fe recibir la curación y entrar en la verdadera vida

Naaman era de Siria, estaba enfermo de lepra y nadie podía curarle... Se fue a Israel y Eliseo le ordenó bañarse siete veces en el Jordán. Entonces Naaman se puso a pensar: los ríos de su patria tenía un agua, mejor que aquella, en la que él mismo se había bañado y nunca le purificó de su lepra... Pero se bañó y, purificado inmediatamente, comprendió que la purificación no venía del agua, sino de la gracia...

Es por eso que se te ha dicho en tu bautismo: no creas solamente lo que ves, porque también tú podrás decir como Naaman: ¿Es este el gran misterio «que ni el ojo vio, ni el oyó, ni el hombre puede pensar?» (1C 2,9). ¡Veo el agua, tal como la veía todos los días! ¿Me puede purificar siendo así que a menudo he bajado a ella y jamás he sido purificado? Aprende por ahí que el agua no purifica sin el Espíritu?

Es por eso que has leído que en el bautismo son «tres los testigos en la tierra: el Espíritu, el agua y la sangre; y los tres están de acuerdo» (1Jn 5,7-8). Porque si apartas uno solo, el sacramento del bautismo desaparece. En efecto ¿qué es el agua sin la cruz de Cristo? Un elemento ordinario, sin ningún poder sacramental. E igualmente, sin agua no hay misterio del nuevo nacimiento porque «el que no nazca de agua y de Espíritu, no puede entrar en el Reino de Dios» (Jn 3,5). El catecúmeno cree en la cruz del Señor Jesús cuyo signo ha recibido, pero si no ha sido bautizado en el nombre del Padre, y del Hijo, y del Espíritu Santo, no puede recibir el perdón de sus pecados ni acoger el don de la gracia espiritual.

El sirio Naamán se sumergió siete veces según la Ley, pero tú has sido bautizado en el nombre de la Trinidad. Has confesado tu fe en el Padre, has confesado tu fe en el Hijo, tu fe en el Espíritu Santo. No olvides la sucesión de estos hechos. En esta fe has muerto al mundo, has resucitado para Dios.


San Ambrosio (c. 340-397)
obispo de Milán y doctor de la Iglesia
Los Misterios 16-21

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