UNA RENAULT 4 USADA, REGALO DE UN PÁRROCO
Poco antes de la vigilia de oración del sábado, el Papa Francisco recibió en la plaza, ante la residencia de Santa Marta, al párroco de Santa Lucia di Pescantina, don Renzo Roca, que regaló al Pontífice un Renault 4 blanco. Don Renzo, de 69 años y antiguo párroco de periferia, se reconoció en las palabras del Papa sobre la sobriedad que deben mantener los sacerdotes en lo que se refiere a medios de transporte, y escribió al Papa ofreciéndole su propio automóvil: “Se me ocurrió –explica don Renzo- regalarle mi Renault 4, que ha recorrido 300.000 km”.
“El 10 de agosto el Papa me telefoneó. ¿Lo primero que nos dijimos? ‘Alabado sea Jesucristo’. Y luego me preguntó si estaba seguro de querer regalársela, si no le haría más falta a otra persona, y sobre todo si yo tenía un auto para mí”.
“Cuando se la entregué subimos al auto, pero no tuve que explicarle al Papa casi nada, porque el Santo Padre me dijo que en Argentina él también usaba una Renault 4, un automóvil que nunca le dejó a pie”. El Papa estrenó su nueva auto para ir al lugar en el que habían quedado los fieles que acompañaron a Don Renzo a Roma, con el fin de saludarlos. Un chico entregó una camiseta al Papa. Don Renzo cuenta: “Yo le dije al Papa que normalmente vendemos las camisetas a 5 euros para recoger fondos para las actividades parroquiales, pero que a él se la regalábamos. Pero el Papa Francisco quiso pagarla. ¡Sacó la cartera y nos dio 10 euros, pidiéndonos el cambio! Por suerte tenía en el bolsillo los 5 euros para devolverle. Increíble”.
“El 10 de agosto el Papa me telefoneó. ¿Lo primero que nos dijimos? ‘Alabado sea Jesucristo’. Y luego me preguntó si estaba seguro de querer regalársela, si no le haría más falta a otra persona, y sobre todo si yo tenía un auto para mí”.
“Cuando se la entregué subimos al auto, pero no tuve que explicarle al Papa casi nada, porque el Santo Padre me dijo que en Argentina él también usaba una Renault 4, un automóvil que nunca le dejó a pie”. El Papa estrenó su nueva auto para ir al lugar en el que habían quedado los fieles que acompañaron a Don Renzo a Roma, con el fin de saludarlos. Un chico entregó una camiseta al Papa. Don Renzo cuenta: “Yo le dije al Papa que normalmente vendemos las camisetas a 5 euros para recoger fondos para las actividades parroquiales, pero que a él se la regalábamos. Pero el Papa Francisco quiso pagarla. ¡Sacó la cartera y nos dio 10 euros, pidiéndonos el cambio! Por suerte tenía en el bolsillo los 5 euros para devolverle. Increíble”.
Don Renzo termina con una sonrisa: “Un guardia suizo, bromeando, me dijo que ahora están un poco preocupados, porque tendrán que estar atentos a lo que hará el Papa Francisco con ese Renault 4…”
No hemos conseguido saber cuántos años tiene exactamente el nuevo automóvil del Papa Francisco, pero serán al menos 21, ya que los últimos ejemplares de este modelo fueron fabricados en 1992.
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