“Es necesario permanecer con lo que no pasa. El mundo va a pasar, así como su concupiscencia; pero aquel que hace la voluntad de Dios va a permanecer para siempre.” Cf. 1 Jn 2,1
Cumplir la voluntad de Dios exige fe de nuestra parte. Todos nosotros tenemos sed de la eternidad, de lo perenne. Y aquel que ya hizo una experiencia con Dios, tiene una sed todavía mayor.
Necesitamos colocarnos en camino para hacer la voluntad de Dios y seguir un camino de madurez, como nos enseña la Iglesia.
Primer paso
encuentro personal con Dios. Es necesario encantarse con Dios. Nosotros nos encontramos con Dios y, muchas veces, como San Pedro, queremos quedarnos en el Monte Tabor. Sin embargo, no podemos tener solo un encuentro con el Señor, necesitamos tener más que eso, necesitamos ir más allá.
“Y diariamente enseñaba en el Templo. Los sumos sacerdotes, los escribas y los más importantes del pueblo, buscaban la forma de matarlo.Pero no sabían cómo hacerlo, porque todo el pueblo lo escuchaba y estaba pendiente de sus palabras” (Lc 19, 47-48).
¡Jesús encantaba hasta a aquellos que no creían en Él! Jesús es Aquél que envuelve y fascina a quien se encuentra con Él. ¡Tú necesitas ser fascinado por Jesús!.
Segundo paso
Romper con las estructuras de pecado. ¡Rompa ahora con el pecado! Ten el coraje de dar todo lo que posees, como el niño del Evangelio que donó los 5 panes y los 2 peces. ¿Cuándo comienza el adulterio? Primero comienza por los ojos, por la mente, luego por el corazón y finalmente por la actitud; la práctica es solo una consecuencia de las concesiones que se hicieron anteriormente.
Tercer paso
Profundización catequística. Muchas veces queremos seguir a Jesús, pero tenemos pereza para leer la Biblia, de conocer la doctrina de la Iglesia y de vivir los sacramentos. Es necesario conocer y vivir la doctrina. Necesitas conocer tu fe, para que, en el momento de la tribulación y la decepción no abandones la Iglesia. ¡No vayas a la Iglesia por el coordinador, el Sacerdote, ve por causa de Jesucristo!
Había ciertos momentos en que Jesús se retiraba del pueblo para formar a sus discípulos. Necesitamos profundizar nuestra fe.
Cuarto paso
es la misión. Y nuestra primera misión es nuestra casa, en las pequeñas cosas. ¡El martirio no se improvisa! Como pretendes dar la vida por Jesús si no eres capaz de ir a comprar pan en la panadería cuando tu mamá te pide. La vida va a probarte para que vivas la santidad en las pequeñas cosas: 99% de las oportunidades para ser santos están en las pequeñas cosas. La voluntad de Dios, la mayoría de las veces, es diferente a la nuestra. Al principio la Virgen María no entendió el proyecto de Dios, pero confió en Él; nosotros también necesitamos confiar en el Señor y en los designios que tiene para nuestra vida.
Nuestra esperanza no es para este mundo. Quien vive estos pasos no tiene miedo del cielo. Solo quien vive atado al pecado tiene miedo de la muerte
Tiago Camargo – TIBA
Misionero de la Comunidad Canción Nueva
(Prédica durante el Retiro de Carnaval 2014)
Misionero de la Comunidad Canción Nueva
(Prédica durante el Retiro de Carnaval 2014)
Fuente Portal Canción Nueva en español
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