MÁS QUE SERVIDORES, AMIGOS DEL SEÑOR

El Sacerdocio de la Amistad

“Este es mi mandamiento: Ámense los unos a los outros, como yo los he amado. No hay amor más grande que dar la vida por los amigos. Ustedes son mais amigos si hacen lo que yo les mando. Ya no los llamo servidores, porque el servidor ignora lo que hace su señor; yo los llamo amigos, porque les he dado a conocer todo lo que oí de mi Padre” 

Jn 15,12-15

¡Mira que revolución la que Jesús hace con la relación que el pueblo tenía con Dios!. El pueblo se comparaba a los siervos de Jesús. Existe un valor en el servir, es una forma de mostrar nuestra diligencia. Tu vas al médico y eres beneficiado por lo que la medicina te ofrece, es una relación interesante; sin embargo, Jesús cree y nos enseña que, en la relación con Dios, es necesario un poco más que el servicio, es mucho más que eso. Es como si Jesús nos enseñase que, si no ponemos alma en lo que hacemos, este servicio no toca en las profundidades de lo que es.

El culto religioso también es una dimensión física por medio del cual el nuestro cuerpo se pone de rodillas, y Jesús quiere que, además de nuestras rodillas dobladas, el corazón también se pone de rodillas.

Cristo nos enseña que el amor a Dios toca en la totalidad de lo que somos y hacemos. Puede ser que, en tu trabajo, no estés poniendo tu corazón. La filosofía dice que faltó el impulso, es decir, disposición, entusiasmo, cuando no has puesto totalidad. Por eso el Señor Jesús asegura que no basta ser siervo del Altísimo, sino que es necesario ser amigo de Él. Aprendí con el padre fundador de la congregación a la que pertenecía que Dios no puede hacer absolutamente nada con mis obras se antes Él no posee mi corazón. Esta frase sirve tanto para ti que es un doctor tanto como para quien no estudió nada. La calidad de nuestra vida depende de calidad de afecto que nosotros ponemos en todo lo que realizamos.

Cualquier persona puede tocar una guitarra y una música, pero es diferente cuando ella pone su alma para hacerlo. No es suficiente ser siervo de la Comunidad Canción Nueva y de la Iglesia si no somos amigos de ella. Cuando trabajamos solo por trabajar, matamos nuestro cuerpo, pero cuando somos amigos del trabajo y ponemos nuestra alma en él, él tiene vida.

Todas las veces en que amamos a alguien, un vínculo silencioso se construye dentro de nosotros. Este es el Evangelio, el verdadero cristiano es aquel que descubre el oficio de dar la vida por sus amigos. No estoy hablando solo de los amigos que llevamos  dentro de casa, sino de aquellos que descubrimos a lo largo del camino, que no conocemos, pero que tal vez sean nuestros amigos. Para nosotros no basta respetar el límite de la dignidad humana, es necesario amar a cada uno. Somos invitados a traer a todos para dentro del corazón. De ese modo, sacamos al pie de la palabra “siervo” y entramos en el sentido de la verdadera amistad. Aún que yo nunca entre en su casa, y que seas una prostituta o homosexual, yo necesito ser un hermano que ama.

¡Yo no tengo el derecho de decirle que tu no es mi hermano por causa de maldad que ya hiciste! Así como muchos ateos luchan por la dignidad de los homosexuales, nosotros debemos luchar por el amor que necesitamos tener por ellos. Nosotros cristianos necesitamos salir de la “sala de espera” que nos hace querer solo la dignidad humana, necesitamos salir para amar las personas en todas las realidades en que ellas se encuentran de dolor y de pecado. A menudo dice: “¡Ay! ¡Pero yo no consigo!”, y to le hablo que nadie te amarró en la cruz, eres libre.

Al construir el Santuario del Padre de las Misericordias Canción Nueva esta diciéndonos: “Venid todos que quieran”. Y si alguien aquí decirle que tu no es digno de la misericordia de Dios, no lo escuches, porque fue un hombre como el monseñor Jonas, que no fue siervo, sino amigo de la humanidad, que tiene el rostro de la misericordia que lo invitó. Monseñor Jonas nunca vio su sacerdocio con  vanidad. Nuestro sacerdocio es para hacernos más amigos de las personas.

Momento de Oración de intercesión por las personas que participan a través de internet

San Juan Pablo II decía que pueblo participa directamente del sacerdocio de Cristo. La Iglesia nos enseña que el sacramento del bautismo nos da tres munus: sacerdote, profeta y rey. Esta palabra de Juan se refiere a la dimensión sacerdotal. Por intermedio de mi sacerdocio soy llamado a ofrecer sacrificios, y que debo ofrecer en el altar y mi orgullo, mi vida vanidad y mis pecados. Tu también es llamado a ofrecer, en el altar de tu vida, su arrogancia y tu orgullo y todo lo que lo te aleja de Dios. Nosotros tenemos oportunidad de ser sacerdotes en las pequeñas cosas.

En Mateo 25, cuando Jesús habla de los fin de los tiempos, Él enumera solo actitudes amorosas, como está: “Tuve hambre y me diste de comer”. Si el rito del cual, participas, la Santa Misa para los católicos y el culto, para ti que es evangélico, no hace amar el otro, de nada vale eso. De que vale participar de varias Misas y cultos si no hay un corazón capaz de ser misericordioso?! Si la Eucaristía de la cual yo participo no me enseña a vivir la totalidad del amor, por más difícil que este sea, es bien probable que yo sea un cristiano “de carrera”. Si tu no reclutar diariamente tu vida pasa por eso, de nada esto va valer. Cuando te dispones a tener un corazón sacerdotal y misericordioso tu vida cambia en el momento, así como tu matrimonio, tus hijos.

Cuando las personas se cansan ellas tienen toda aquella atracción unas por las otras, pero cuando va pasando el tiempo, esta atracción va acabando, y lo que queda es el amor verdadero , que va creciendo aún delante de las imperfecciones. Cuando vínculo amoroso nos enseña a dar la vida por el otro, eso se convierte amor que no es capaz de acabar. En la eternidad nosotros somos todas hermanos y amigos y este vinculo que nosotros necesitamos buscar aquí y ahora.

¿Cuanto cuesta lo que amas? ¿Cuanto cuesta aquellos que amas? Tu no tienes idea del cuanto cuesta aquellos que ama, y por muchas veces, por no asumir la gracia del sacerdocio que nos recibimos del bautismo, no damos valor a las personas que están de nuestro lado.

Padre Fábio de Melo
Predica durante el evento ‘Hosana Brasil’

fuente PORTAL CANCIÓN NUEVA EN ESPAÑOL