Es común en nuestra comunidad contemplar cada miércoles
la llegada de personas profundamente heridas.
Aunque muchos cargan sobre sí, dolores en sus cuerpos,
la carga más pesada,
la que duele sin tener nombre,
es la que revelan los ojos:
la mirada de quien se siente insatisfecho, vacío.
Insatisfecho de la vida,
vacío de esperanza.
Vacío de alegría.
Sin luz que pueda iluminar.
Algunos cargan sobre sí la duda de muchos años:
¿existirá salida?
Presta atención,
no es mucho lo necesario.
El Señor agudizó nuestros oídos y,
el Espíritu Santo y la experiencia dejan ver claro una cosa:
La insatisfacción gana cuando "olvidamos aquello que somos"
Sí, la verdad más fuerte es la que revela lo que somos:
¡"Hijos de Dios"!
Si estás insatisfecho, recuerda la más simple verdad..
Tal vez olvidaste lo que eres,
te has vestido de sombras y,
en un descuido, te convertiste en una caricatura,
no estás siendo el ser humano que puedes ser.
¡Vuelve a redescubrir la llama que hay en vos!
Redescubre tu identidad: hijo del "Sol", hijo de la Luz...
Si la vida nos encuentra en algún momento,
alrededor del altar,
espero tu abrazo,
¡Dios te Bendice!
Miguel
Comunidad Piedras Vivas
No hay comentarios:
Publicar un comentario