El TOC – Trastorno Obsesivo Compulsivo – Religioso existe y surge en los pensamientos
Según Aristides Volpato, especialista en Trastorno Obsesivo Compulsivo, el TOC está caracterizado por pensamientos específicos, imágenes y palabras que “invaden” nuestro pensamiento y nuestra conciencia. El problema en cuestión es que esos pensamientos distorsionados surgen constante y repetitivamente, convirtiéndose así en una obsesión. Ese pensamiento obsesivo provoca en las personas un sentimiento de angustia, miedo, aflicción y falta de control, por no lograr controlar los pensamientos. Así, terminan complaciendo, cediendo a esos pensamientos intrusivos e impositivos.
Me imagino que muchos de ustedes ya escucharon hablar del TOC, pero estoy segura que poco escuchar hablar de que existe el TOC Religioso. Esa categoría existe y es clasificada como obsesiva, o sea, surge fuertemente en los pensamientos.
¿Qué es el TOC Religioso?
¿Todos los creyentes tienen TOC? ¡No! Existe una diferencia entre el comportamiento religioso y el obsesivo. ¿Cómo diferenciarlos? La persona que sufre el trastorno tiene pensamientos y comportamientos irracionales, volviéndose “desajustados” a la vista de los que están alrededor.
En el ámbito de la obsesión, el contenido de los pensamientos más comunes son: pecado, demonio, culpa, escrupulosidad, sacrilegio y blasfemia. Una ejemplo del contenido de pecado: La mujer casada piensa “no puedo tener relación sexual con mi esposo, porque sentiré placer y eso es pecado”.
Más allá del contenido que la persona tiene, aun sabiendo que son absurdas e ilógicas, no logra separarse de ellos. Así surge el comportamiento ritualizado y repetitivo para su sobrevivencia. ¿Cómo? La persona se confiesa todos los días o día de por medio. Permanece todo el tiempo con un rosario que fue bendecido por cierto sacerdote y que tiene mucha unción. Hace ayuno diariamente como forma de penitencia.
Lo que pasa con quien tiene TOC religioso es que el contenido de su trastorno son prácticas religiosas, haciendo difícil saber si es devoción y una relación sana con Dios o si ya se convirtió en un trastorno.
Aprende a identificar el TOC Religioso
El indicador es el siguiente: ¿Estás exagerando, fuera de lo que la mayoría de la personas de referencia de la Iglesia hacen? Si tu respuesta es “sí”, entonces probablemente sea un TOC.
Existe también una categoría, que es la compulsión mental. Es la más difícil de identificar y la más común. Son aquellos que no logran hacer nada antes de una oración específica. En ese caso, cada uno tiene un contenido diferente. Por ejemplo: hay personas que solo salen de su casa después de hacer la oración de la Sangre de Cristo tres veces. O siempre come solamente después de hacer de hacer la oración de San Benito por miedo de que la comida esté contaminada. Existen también aquellos que creen que, por ser los únicos con “espiritualidad” en sus casas, todos los demás son impuros y pecadores, por eso necesitan rezar el rosario todo el tiempo que estén en la casa.
Podríamos estar enumerando un sinfín de ejemplos, sea sobre obsesión (pensamientos), compulsión (comportamiento) o sobre la asociación de los dos. Lo más importante es que te hagas esta pregunta: ¿Cuánto tiempo gastas en esos pensamientos? ¿Esos pensamientos me generan angustia? ¿Cómo te comportas con tus prácticas religiosas? ¿Aquello que me debe traer paz y confianza en Dios me ha traído incomodidad y angustia? ¿Tu comportamiento, en lugar de ser un testimonio, ha dificultado aún más tu relación con los que están cerca?
Si la respuesta es “si”, eres un fuerte candidato a tener TOC. ¡Busca ayuda! Busca un profesional de la Psicología que sea cristiano y, si es posible, un director espiritual que te oriente. Dios nos quiere cerca de Él pero de forma equilibrada y saludable.
Aline Rodrigues
Misionera del Segundo Eslabón la Comunidad Canción Nueva. Psicóloga desde el 2005, con especialidades en el área clínica y empresarial.
Misionera del Segundo Eslabón la Comunidad Canción Nueva. Psicóloga desde el 2005, con especialidades en el área clínica y empresarial.
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