"Porque los que pertenecen a Cristo Jesús han crucificado la carne con sus pasiones y sus malos deseos. Si vivimos animados por el Espíritu, dejémonos conducir también por él.”
Gálatas 5, 24-25
Los que tienen el coraje de programar su vida con Jesucristo crucifican su carne con sus deseos en la lucha del día a día. Y San Pablo nos exhorta a vivir de acuerdo con el Espíritu Santo, una vez que vivimos por el Espíritu. Ese es el verdadero bautismo en el Espíritu Santo. ¡Ese es el bautismo en el Espíritu que el Señor quiere concedernos hoy y siempre!
Mons. Jonas Abib
Pentecostes Hoje - pagina 52
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