SI NOS DEJAMOS ESCLAVIZAR POR LA TRISTEZA, ELLA NOS HARÁ DAÑO

Nuestra vida está llena de acontecimientos, y muchos de ellos pueden causarnos tristeza. Tal como Jesús nos dijo: "Los pobres los tendrán siempre con ustedes " (Mt 26,11), también podemos decir: "Tristezas siempre tendremos". El mismo Jesús pasó por muchos momentos de tristeza y nos enseñó: “Les aseguro que ustedes van a llorar y se van a lamentar; el mundo, en cambio, se alegrará. Ustedes estarán tristes, pero esa tristeza se convertirá en gozo” (Jn 16,20).

Si nos dejamos esclavizar por la tristeza, seguramente ella causará graves daños a nuestra salud. La alegría es una fuente principal en nuestra vida y la gran medicina para nuestros corazones, ya que “Un corazón alegre es el mejor remedio, pero el espíritu abatido reseca los huesos”(Pr 17,22) . Lo que debemos hacer es "exorcizar" la tristeza de nuestro corazón para ser llenos del Espíritu Santo, porque el gozo es el fruto de la gracia de Dios en nosotros. Dice el Señor: "No estén tristes, porque la alegría en El Señor es la fortaleza de ustedes" (Ne 8,10).

Si la alegría humana ya es un canal de sanación para nosotros, ¡cuánto más la alegría que proviene del Espíritu Santo puede transformar todo lo que nos rodea! Dios es nuestra alegría y salvación. No podemos cultivar sentimientos negativos, porque la alegría en El Señor es nuestra fuerza.
¡Dios los bendiga!

Tu hermano,
Monseñor Jonas Abib 
Fundador de la Comunidad Canción Nueva
Adaptación del original en portugués