“Hay toda una humanidad que espera: personas que han perdido toda esperanza, familias en dificultad, niños abandonados, jóvenes sin futuro alguno, enfermos y ancianos abandonados, ricos hartos de bienes y con el corazón vacío, hombres y mujeres en busca del sentido de la vida, sedientos de lo divino”. (Papa Francisco). Que nuestras actitudes cotidianas sean abrigo y hogar para quienes viven sin abrigo y sin hogar. Ofrece tu día por las intenciones del Papa. ¿Es tu corazón un hogar cálido para tus hermanos?
Con Jesús durante el día:
Con Jesús durante el día:
«Jesús dijo a sus discípulos: « En aquel tiempo, solían acercarse a Jesús todos los publicanos y los pecadores a escucharle. Y los fariseos y los escribas murmuraban entre ellos: «Ése acoge a los pecadores y come con ellos.» (Lc 15,1-2) ¿A quiénes acoges en tu vida? ¿Actúas desde el qué dirán? Pídele a Jesús que te regale sus mismos sentimientos.
Con Jesús por la noche:
Con Jesús por la noche:
Mira tu día. ¿Con quiénes te encontraste hoy? ¿Quiénes te encontraron hoy? ¿Qué actitud deseas tener mañana para los encuentros que vendrán?
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