“Ahora mismo iré a la casa de mi padre y le diré: “Padre, pequé contra el Cielo y contra ti” (Lc 15,18)
Existe una expectativa en el Cielo, en tu casa, en la calle, una expectativa en las personas que saben que estás aquí en Canción Nueva para un encuentro con Dios. Nuestra misión es proporcionarte ese encuentro. Y el maravilloso tema que va a ayudarnos es: “Él recapacitó”.
Cuando nos reunimos para preparar este encuentro, dijimos: “Alguien en algún lugar está recapacitando, cayendo en sí”. Hace meses cuando comenzamos nuestras reuniones para la realización de este PHN, estábamos seguros de que alguien iba a recapacitar. Estábamos programando una fiesta para ti. Este campamento es para que tengas un encuentro con Dios, para que reconozcas tu error, tu metida de pata, tus heridas, caídas y falta de perdón, aquella situación dolorosa que viviste y de la que no logras reponerte.
La visión que Dios me dio
Un día cuando preparábamos este encuentro, Dios me dio una visión: Jesús subiendo sobre una montaña de basura con un olor nauseabundo. Arriba de toda esa basura algo brillaba. Sé que es difícil creer que, encima de toda esta basura, alguien vio el brillo de tu alma. Hoy queremos enseñarte que ya no eres tú el que vive sino que Cristo vive en ti. Tú está siendo arrancado de los escombros, de la basura. Ante eso puedes declarar: “Ya no soy yo quien vive, sino Cristo quien vive en mí”.
Tenemos a alguien que se compadece de nosotros y nos asume
“Tenemos, pues, un sumo sacerdote excepcional, que ha entrado en el mismo cielo, Jesús, el Hijo de Dios. Esto es suficiente para que nos mantengamos firmes en la fe que profesamos. Nuestro sumo sacerdote no se queda indiferente ante nuestras debilidades, pues ha sido probado en todo igual que nosotros, a excepción del pecado. Por lo tanto, acerquémonos con plena confianza a la sede de la gracia, a fin de obtener misericordia y hallar la gracia del auxilio oportuno” (Heb 4,14-16).
¿Sabes qué hará Jesús con el que erró? ¡Lo salvará!
Tenemos un Sacerdote que es capaz de compadecerse de nosotros. En el Antiguo Testamento, los sacerdotes tomaban un animal, lo mataban y se lo ofrecían a Dios para reconciliarse con Él. En el Nuevo Testamento, Dios dijo: “¡Basta! Terminen con eso de matar animales. Voy a mandar a Mi Hijo, la segundo persona de la Santísima Trinidad”
Él se hizo hombre, igualito a nosotros. Las tentaciones que sientes, Él también las sintió solo que no pecó.
¿Eres adoptado por tus padres? Jesús está diciéndote que te entiende, porque Él también fue adoptado. ¿Hay alguien que haya perdido a su papá? Jesús también a su papá. ¿Alguien ya se sintió traicionado? Pues Jesús también fue traicionado. Él entiende y conoce todos tus dolores.
¿Eres adoptado por tus padres? Jesús está diciéndote que te entiende, porque Él también fue adoptado. ¿Hay alguien que haya perdido a su papá? Jesús también a su papá. ¿Alguien ya se sintió traicionado? Pues Jesús también fue traicionado. Él entiende y conoce todos tus dolores.
Cuando lloraste, Él estuvo ahí llorando contigo
La última vez que fumé marihuana, Cristo estaba llorando dentro de mí. Pero, cuando fui a un encuentro de oración y experimenté por primera vez una alegría que nadie me robaba, que el pecado no me daba, Cristo me dijo: “¡Qué genial! Yo estaba dentro de ti desde que naciste; ahora sí, estás experimentando mi alegría”.
Testimonio de Felipe (hijo de Dunga)
Cuando mi hijo era pequeño, tuvo que pasar por una cirugía del corazón compleja. Hoy, Dios está haciendo algo parecido contigo.
Felipe (hijo de Dunga): Cuando era niño, no tenía noción del proceso que necesité vivir, no tenía noción de la complejidad del tratamiento del corazón. Qué bueno que no tengamos noción de lo que Dios está haciendo con nosotros, sino tal vez tendríamos miedo y no le permitiríamos hacer lo que lo que tiene que hacer. Podemos pensar: “¡Dios mío! ¿Cómo le va a pasar eso al hijo de un misionero que ya renunció a tantas cosas para servirlo?” Era para que eso se transformara en un testimonio, para que algo malo se pudiera transformar en algo bueno.
Dunga: Jesús no es diferente, Él siente compasión por nosotros. Ahora di: “¡Jesús me entiende!” ¡Sal de abajo de esos encuentros!
Dunga
Misionero de la Comunidad Canción Nueva y mentor del PHN
Prédica durante el Campamento PHN 2016
Misionero de la Comunidad Canción Nueva y mentor del PHN
Prédica durante el Campamento PHN 2016
Fuente PORTAL CANCIÓN NUEVA EN ESPAÑOL
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