“Santo Padre, el mundo es malo, el espíritu de satanás triunfa en la pervertida sociedad y una multitud de almas se distancias del Corazón de Dios. En estas tristes condiciones los cristianos no piensan en dirigir unánimes súplicas a Aquel que puede “renovar la faz de la tierra”.Hacen tantas novenas y eso es bueno. Pero la única que fue pedida por el propio Salvador, y hecha por María Santísima y los Apóstoles, es ahora casi completamente olvidada.Son alabados por los predicadores todos los santos, pero ¿Dónde se escuchan predicas sobre el Espíritu Santo?(…) Santo Padre, solamente usted puede hacer que los cristianos retornen al Espíritu Santo para que el Espíritu Santo retorne a nosotros, abata el dominio del demonio y nos conceda la deseada renovación de la faz de la tierra”
Beata Elena Guerra
17 de abril de 1895
Primera carta al Santo Padre
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