La palabra “resentimiento” quiere decir: sentir de nuevo aquello que ya habíamos sentido [re+sentimiento]. Si continuamos guardando resentimientos, las venas de nuestro corazón están cerradas. No va tardar para que él esté todo cerrado.
No tenemos el derecho de quedar heridos con las personas que nos han hecho mal y nos hirieron. No podemos quedar resentidos y desearles el mal, porque hicieron cosas malas. Si lo hacemos así, estamos matándonos.
¡El resentimiento mata! Mata el alma y el cuerpo, porque, cuando acumulamos resentimiento y decepción, vamos perdiendo la alegría.
Es necesario tener el coraje de superar los resentimientos, las heridas, el rencor y la ira. Es necesario romper con todos estos sentimientos negativos. Ellos generan enfermedades, muertes. El Señor quiere darte la salvación. Necesitamos abrir nuestro corazón.
Busca la inspiración del Espirito Santo, recuerda a las personas o las situaciones que necesitas perdonar y realiza gestos concretos de perdón y amor.
Busca la inspiración del Espirito Santo, recuerda a las personas o las situaciones que necesitas perdonar y realiza gestos concretos de perdón y amor.
¡Dios te bendiga!
Monseñor Jonas Abib
Traducción: Thaís Rufino de AzevedoMonseñor Jonas Abib
Fuente Portal Canción Nueva
No hay comentarios:
Publicar un comentario