Tú eres el Poder de Dios,
eres el Viento que conduce, que lleva, que arrastra;
eres el Fuego que todo lo Purifica,
eres el Agua que sacia nuestra sed de Infinito.
¡Empapanos de Ti!
¡Empapanos de Tu Presencia, de Tu Gracia,
de Tu alegría!
Y danos fuerza para vivir con valentía
para enfrentar problemas situaciones, dificultades
y creyendo en Tu Palabra.
Alabado seas Tu que que lo haces todo,
que lo puedes todos, que tienes todo poder,
que nunca nos abandonas.
Bendice a cada uno de los nuestros,
a nuestros papás y mamás
a nuestros niños y ancianos,
a los que están abatidos, a los que están solos,
a los que se despiertan acompañados de amor
y a los que abandonados de afectos sólo te tienen a Ti.
¡Amén!
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