Con Jesús por la mañana.
“Nuestra fe –expresada en los evangelios y en la tradición de la iglesia- no es un verso o un cuento, ni siquiera es una hermosa narración porque tiene incoherencias por todas partes. Nuestra fe en Jesucristo es ante todo un “modo” o “estilo de vida”. Es una actitud, o como diría San Ignacio de Loyola es el modo nuestro de proceder” (Javier Rojas sj). Reflexiona: ¿Perdonas de corazón? ¿Eres agradecido? ¿Sabes trabajar y descansar? ¿Te haces tiempo para celebrar y compartir? Concreta un propósito para crecer al estilo de Jesús y ofrece por la intención del mes.
Con Jesús por la tarde.
“Y los Ángeles le dijeron a María: Mujer, ¿por qué lloras? Ella les respondió: Porque se han llevado a mi Señor, y no sé dónde le han puesto. Dicho esto, se volvió y vio a Jesús, de pie, pero no sabía que era Jesús” (Juan 20, 13-14). ¿Dónde te encuentras con el Señor en tu vida cotidiana? Pide a María Magdalena, que amó mucho al Señor, que te ayude a cultivar el estilo de Jesús para reflejarlo entre tus hermanos, mientras continúas reflexionando con el propósito de la mañana.
Con Jesús por la noche.
Descubre la novedad. Cada día es una oportunidad que trae novedades para ti y en ellas, Dios se te hace presente. Pasa por el corazón lo que has vivido, personas, acontecimientos, lugares ¿Cuál fue la novedad de Dios para ti hoy? ¿Cómo has vivido esas novedades? ¿Qué aprendiste? Agradece a Dios.
No hay comentarios:
Publicar un comentario