El re-encenderá la llama
Dios es totalmente providente. Para nosotros que somos comunidad Canción Nueva, que fuimos criados para tratar a aquellos que necesitan la Divina Misericordia, llamados a ser retratos de ella. Necesitamos ser Jesus Misericordia. La primera característica es la misericordia, pero llegará el tiempo de su fin, pues todo tiempo tiene un fin. Y el Señor tendrá que usar su justicia y separar la cizaña, pero antes de eso, es necesario que nosotros, así como María, nos convirtamos.
“El no gritará, no levantará la voz ni la hará resonar por las calles. No romperá la caña quebrada ni apagará la mecha que arde débilmente. Expondrá el derecho con fidelidad; no desfallecerá ni se desalentará hasta implantar el derecho en la tierra, y las costas lejanas esperarán su Ley” (Is 42, 1-4).
Aunque no estés rajado por el pecado, Jesús no va a apagar la mecha que aún humea. Como la llama de la vela cuando está acabándose, el Señor no la apagará. Jesús no quiere apagarte. El quiere que vuelvas a El. El reencenderá la llama de quien lo quiera.
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