Señor y Dios nuestro,
En ésta hora en que la naturaleza
Despierta sus fuerzas escondidas…
¡Envía Tu Espíritu Santo sobre
nosotros!
Él es la Fuerza Vital,
La Fuerza que Santifica, que da vida.
Él es la Fuerza que Sana y libera,
Que enciende toda esperanza,
La Fuente de todo consuelo.
¡Derrama Tu Espíritu Santo, Señor!
Y danos gozar de sus dulzuras.
Que nada quede oculto a Su Luz;
Que todo sea sometido a su acción,
Que todo sea sometido a su fuego
purificador.
Haz Tu obra en nosotros,
Y danos la gracia de estar atentos,
Despiertos y expectantes,
Y susura…
¿qué podemos hacer juntos hoy?
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