«Y ese testimonio provoca curiosidad en el corazón del otro, esa curiosidad la coge el Espíritu Santo y se pone a trabajar. La Iglesia cree por atracción, crece por atracción. Y la transmisión de la fe se da con el testimonio, hasta el martirio. Cuando se ve esta coherencia de vida con lo que decimos siempre provoca curiosidad. ¿Por qué este vive así? ¿Por qué lleva una vida de servicio a los demás?»
3 de mayo de 2018.
“Transmitir la fe” no quiere decir “hacer proselitismo”, “buscar gente que apoye este equipo de futbol” o “este centro cultural”. Se trata de testimoniar con amor. Esta es la reflexión que el Papa Francisco ha ofrecido durante la homilía de la Misa celebrada esta mañana en Santa Marta.
Partiendo de una cita de la Carta de San Pablo a los Corintios, el Pontífice aclara que “la fe no es solo recitar el ‘Credo’, sino que se expresa en él”. Transmitir la fe no quiere decir “dar información” sino “fundar un corazón” en la “fe de Jesucristo”.
Esta transmisión de la fe, dice el Papa, no puede realizarse mecánicamente, como cuando se quiere aprender un tema de un libro. “Transmitir la fe no se puede hacer de forma mecánica: ‘Estudia este libro y después te bautizo’. No. Es otro el camino para transmitir la fe: transmitir lo que nosotros hemos recibido. Y este es el desafío para un cristiano: ser fecundo en la transmisión de la fe. También es el desafío de la Iglesia: ser madre fecunda, dar a luz hijos en la fe”.
Con una caricia
El Papa Bergoglio insiste en la transmisión de la fe que atraviesa generaciones, de la abuela a la madre, a través del perfume del amor.
El propio credo viaja no solo con las palabras sino con las “caricias”, con la “ternura”. En las palabras del Papa encuentran espacio las cuidadoras, casi segundas madres. Extranjeras o no, hay muchos casos de cuidadoras que transmiten la fe con cuidado, ayudando a crecer.
La Iglesia crece por atracción
Por tanto, una primera actitud de la transmisión de la fe es, seguramente, el amor. La segunda es el testimonio.
“Transmitir la fe no es hacer proselitismo, es otra cosa mucho más grande. No es buscar a gente que apoye este equipo de fútbol, este club o este centro cultural. Esto está muy bien pero la fe no funciona por proselitismo. Lo dijo muy bien Papa Benedicto XVI: ‘La Iglesia no crece por proselitismo sino por atracción’. La fe se transmite con el testimonio”.
El testimonio genera curiosidad
Testimoniar en la vida de todos los días aquello en lo que se cree nos hace justos “a los ojos de Dios”, suscitando curiosidad en los que nos rodean.
“Y ese testimonio provoca curiosidad en el corazón del otro, esa curiosidad la coge el Espíritu Santo y se pone a trabajar. La Iglesia cree por atracción, crece por atracción. Y la transmisión de la fe se da con el testimonio, hasta el martirio. Cuando se ve esta coherencia de vida con lo que decimos siempre provoca curiosidad. ¿Por qué este vive así? ¿Por qué lleva una vida de servicio a los demás? La curiosidad es la semilla que coge el Espíritu Santo y la hace germinar. La transmisión de la fe nos hace justos, nos justifica. La fe nos justifica y en la transmisión damos justicia verdadera a los demás”.
No hay comentarios:
Publicar un comentario