Como actúa el Demonio.
El padre Gabriele Amorth nos enseña que existen dos tipos de acción del demonio sobre la vida de los hombres: Acción ordinaria y acción extraordinaria.
Como acción ordinaria podemos decir de la tentación; todos nosotros somos alcanzados por ella y algunas veces víctimas de ellas. Recordemos que hasta el mismo Jesús sufrió tentaciones en Su vida.
Pero existe también la acción extraordinaria del demonio, y el padre Gabriele nos explica aquí de forma clara. Estas explicaciones las puedes encontrar en su libro: "Nuevos relatos de un exorcista":
1 – Disturbios Externos: indicamos aquellos sufrimientos físicos (flagelaciones, golpes, empujones con varias secuencias, caídas de objetos, etc.) que encontramos en la vida de ciertos santos: El Santo Cura de Ars, San Pablo de la Cruz, San Padre Pio... y que son menos raros de lo que podría parecer. Una impresión es que el demonio actúa permaneciendo del lado de afuera de la personas; si, por acaso, fuese encontrada una acción a partir de adentro, se trataría de una presencia solamente provisoria, limitada a la duración de aquellas perturbaciones.
2 – Posesiones diabólicas: Es una forma más grave y comporta la presencia permanente del demonio en un cuerpo humano, aunque la acción maléfica no sea continua: las crisis alternan con momentos de reposo. Implica manifestaciones temporarias y bloqueo mental, intelectual y volitivo. Pueden desencadenar reacciones violentas, conocimiento de lenguas desconocidas de la persona, fuerza sobrehumana, conocimiento de cosas ocultas o de pensamientos ajenos. Es típica la aversión a lo Sagrado, esencialmente acompañado de blasfemias. Pero es necesario estar bien prevenidos sobre los camuflajes diabólicos.
3 – Vejaciones diabólicas: es importante comprender que en cada uno de estos casos existe una gran variedad de síntomas y también grandes diferencias de gravedad. Las vejaciones son formas que alcanzan la salud, el trabajo, los sentimientos, las relaciones con los otros (algunos efectos: momentos de furia sin motivo, tendencia al aislamiento total...)
Puede alcanzar a individuos o grupos, aún muy numerosos.
4 – Obsesiones diabólicas: Pensamientos obsesivos, frecuentemente absurdos, pero de tal orden que la víctima no está en condiciones de liberarse de ellos, viviendo, por eso, en constante estado de postración, con tentaciones persistentes de suicidio. (Recuerdese que el suicidio es una tentación bien presente, también en los casos anteriores)
Muchas veces determinar una doble personalidad. La voluntad permanece libre, pero como oprimida por los pensamientos obsesivos.
5 – Infectaciones diabólicas: Con esta expresión, no indicamos los maleficios sobre el hombre, sino aquellos que tocan lugares (casas, escritorios, comercios, campos...) objetos (automóviles, almohadas, colchones, muñecos...) y animales.
6 – Finalmente, la expresión Sujeciones diabólicas: Indica un pacto voluntario, explicito o implícito, pleno, mediante el cual una persona se somete al señorío del demonio. Pero también puede crear vínculos especiales, aunque por causas involuntarias y, de ese modo, caer en una de las formas precedentes, sobre todo en la forma más grave, la posesión diabólica.
Estaré rezando por sus intenciones en ésta semana!
Dios te bendiga!
Canción Nueva. Adaptación del original en portugues.
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