con ansias de Ti mi corazón se despierta.
porque anhelo de Tu visita y de Tu Gracia es mi respirar.
Aquí estoy aguardando,
como la luz pacientemente aguardó para quebrar la noche
así en gozoso quebranto,
en mansa esperanza yo espero en Ti,
porque aunque sea grande la lucha
una y grande es mi confianza y tiene Tu Nombre,
y tiene el sello de Tu promesa:
que harás nuevas todas las cosas.
Derrama Tu Espíritu Santo, Señor,
sobre mi ser que en ansiedad aguarda,
y cuando la Gracia de Su Unción me toque,
cuando Tu paso por mi sea sentido,
cuando Tu cercanía estremezca mis entrañas,
dame el canto del pájaro que al amanecer se exalta
por la noche pasó y la Salvación toco mi puerta.
Amén!
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