María e Isabel, el primer grupo carismático
"Yo donde veo más real a María es en la Visitación.
Dicen que María fue la primera carismática y es verdad si miramos a la casa de Isabel.
Después de la experiencia de Espíritu que significó la Anunciación, la Virgen se agarró a la señal que le había dado el ángel.La única prueba de la acción del Espíritu, el signo, la señal, era que Isabel, a la que llamaban estéril, estaba ya en el sexto mes e iba a dar a luz. María se fue presurosa a la montaña para verlo con sus propios ojos".
"¿Con quién podría hablar lo que le había pasado sino con su pariente que había sido también objeto de un favor divino?
El carismático entiende perfectamente esto porque después de su experiencia del Espíritu le entran ganas de alguien con quien compartir lo que siente. No vale cualquiera, ni siquiera sus padres, porque no le entenderían. Y no son unas ganas cualquiera, sino muy urgentes".
"Al llegar a la casa de Isabel se formó el primer grupo carismático compuesto de las dos madres y los dos hijos, todavía en el seno de ambas. Allí se desataron todos los carismas. Prorrumpe Isabel en profecía: ¡De dónde a mí que me venga a visitar la madre de mi Señor! El niño salta en su seno y las dos alborozadas proclaman la alegría y gozo espiritual del Señor".
"Ambas se aseguran de que ha sido el Señor el que les ha hecho el beneficio, se sienten elegidas y María expulsa de su corazón todos sus temores con la alabanza super-ungida del Magníficat".
"Tres meses estuvieron juntas, rezando por sus maridos, a los que faltaba la fe y confortándose mutuamente y entregándose ellas y todo lo que sucediera en brazos del Señor. Muchos de estos desbordes pueden presenciarse con frecuencia en cualquier grupo carismático.
¡Cómo sería, qué magnífica alabanza!
¡Qué fuerza del Espíritu habitaría en medio de ellas!
Comenzaba el nuevo Testamento, estaba a punto de llegar Jesús,
el que había de salvarnos a todos".
Chus Villarroel
Teología de la Renovación Carismática.
"Yo donde veo más real a María es en la Visitación.
Dicen que María fue la primera carismática y es verdad si miramos a la casa de Isabel.
Después de la experiencia de Espíritu que significó la Anunciación, la Virgen se agarró a la señal que le había dado el ángel.La única prueba de la acción del Espíritu, el signo, la señal, era que Isabel, a la que llamaban estéril, estaba ya en el sexto mes e iba a dar a luz. María se fue presurosa a la montaña para verlo con sus propios ojos".
"¿Con quién podría hablar lo que le había pasado sino con su pariente que había sido también objeto de un favor divino?
El carismático entiende perfectamente esto porque después de su experiencia del Espíritu le entran ganas de alguien con quien compartir lo que siente. No vale cualquiera, ni siquiera sus padres, porque no le entenderían. Y no son unas ganas cualquiera, sino muy urgentes".
"Al llegar a la casa de Isabel se formó el primer grupo carismático compuesto de las dos madres y los dos hijos, todavía en el seno de ambas. Allí se desataron todos los carismas. Prorrumpe Isabel en profecía: ¡De dónde a mí que me venga a visitar la madre de mi Señor! El niño salta en su seno y las dos alborozadas proclaman la alegría y gozo espiritual del Señor".
"Ambas se aseguran de que ha sido el Señor el que les ha hecho el beneficio, se sienten elegidas y María expulsa de su corazón todos sus temores con la alabanza super-ungida del Magníficat".
"Tres meses estuvieron juntas, rezando por sus maridos, a los que faltaba la fe y confortándose mutuamente y entregándose ellas y todo lo que sucediera en brazos del Señor. Muchos de estos desbordes pueden presenciarse con frecuencia en cualquier grupo carismático.
¡Cómo sería, qué magnífica alabanza!
¡Qué fuerza del Espíritu habitaría en medio de ellas!
Comenzaba el nuevo Testamento, estaba a punto de llegar Jesús,
el que había de salvarnos a todos".
Chus Villarroel
Teología de la Renovación Carismática.
No hay comentarios:
Publicar un comentario