El fin de una relación en el hombre

¿Cómo reacciona el hombre frente al término de una relación?   

Hombres y mujer reaccionan de forma diferente frente al término de una relación

El artículo anterior fue sobre la reacción de las mujeres cuando el enamorado rompe la relación. ¿Y el hombre, como él piensa? ¿Cómo se da su respuesta cuando es la mujer que termina? De hecho, reacciona diferente a ella.

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1º Etapa: Inconformismo

“Inconformado” significa estar fuera de la forma, de la situación o disonante, diferente del molde. El joven se siente incomprendido, no entiende por qué sus esfuerzos y sus demostraciones de amor con ella no tuvieron efecto. Simplemente, él no se imagina viviendo esa situación, no logra verse en esa realidad. Algunos ni admiten que la ex enamorada es libre y puede no querer estar más con él.

Nosotros, hombres nos volcamos más hacia las cosas prácticas y somos poco dados a la subjetividad, entonces pensamos que casi todo funciona en el formato: acción y resultado. Por lo tanto, si él luchó para que la relación funcione, la situación final debería corresponder a su empeño. Mientras tanto, las mujeres son subjetivas, o sea, para ellas 2+2 no siempre da 4, pero todo depende, más allá de lo obvio, de lo que se ve y de lo que se toca.

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El no deja de creer en sí mismo, pero se ve aturdido. También es verdad que el hombre es más inclinado a la agresividad e impulsividad, por lo tanto hay que tener cuidado si tienes sentimiento de rabia de tu ‘ex’ o ganas de venganza física, verbal o de otro tipo de torturas psicológicas como provocaciones o la retención de cosas que le pertenecen a ella y que están contigo. Nunca cedas a esos deseos pues te arrepentirás de estos hechos tan malos o hasta puedes cometer un crimen.

Bueno, ya aprendiste que tus esfuerzos pueden ser frustrados. La buena noticia es que eso va a pasar. Sistemáticamente (como nos gusta entender las cosas) si no te centras en el dolor y enfocas tu vida hacia adelante, en algún momento la olvidarás. Intenta preguntarte; “¿Qué puedo hacer ahora? y no “¿cómo será mi vida de ahora hacia adelante?”. La primera pregunta denota reacción, la segunda, postración frente al hecho.

2º Etapa: Querer mostrar que estás bien

Después de algunas semanas de haber roto, él aún la ama y está con el corazón partido pero en un encuentro casual con ella, hace cuestión de reirse junto con sus amigos y quien sabe hasta demostrar que está con nueva compañía. Si la ex-enamorada se acerca y le pregunta: ¿cómo andas?, el hombre dice que todo está genial, y hasta continúa conversando pero no toca en el asunto de la ruptura y relata todo lo que está haciendo y cómo está feliz.

Hasta aquí, todo bien. Realmente no sería positivo ‘lloriquear’ frente a ella y sus amigas. Pero tú necesitas de un amigo con quien puedas desahogar lo que pasa en tu interior y es importante que sea hombre, para que no suceda que desahogandote con una amiga, alguno de ustedes confunda la amistad con otra cosa.

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3º Etapa: Indiferencia

En este punto, el hombre casi se desencadenó de la ‘ex’, pero aún no totalmente. El se comportará con indiferencia, sin querer saber lo que ella está haciendo en su vida, si ella está bien o no, y hasta se alejará de su mundo. En el fondo, no significa que no será solidario con la antigua enamorada, sino que se esforzará en sobreponer pensamientos de rechazo frente a su sentimiento que aún está humeando. “No me importa”, “lo que ella haga con su vida, es problema de ella” y si ella aparece con un nuevo enamorado, él dirá : “quien sale perdiendo es ella, yo la haría más feliz que ese chico”.

¡Ok! Estás progresando, pero cuidate de no quedarte apenas con lo que fue bueno. No te dejes llevar por la tendencia de menospreciar toda la relación ni toda la persona. Es justo que te alejes porque necesitas un tiempo para “desencantarte” pero la indiferencia es la antesala para la falta de perdón y esta última es capaz de matar tu esperanza y capacidad de amar.

4º Etapa: Perdón y cierre del proceso

En esta fase ya estás sonriendo de nuevo, hasta te puedes encontrar con tu ‘ex’ sin nada malo dentro de ti, aunque ella esté acompañada. Piensas “aprendía ser mejor después de estar con ella”.

¡Este es el punto! No hay dolor que perdure para siempre y cuando se confía en el Señor no hay mal que no pueda revertirse en algún bien.

fuente Portal Canción Nueva en español