sábado, 8 de noviembre de 2014

LAS ENFERMEDADES EMOCIONALES

Quiero  hablar de la importancia de las músicas para orar y evangelizar

El Papa Benedicto XVI habló del uso de la música para la evangelización. En el Apocalipsis está escrito que una de las cosas que haremos en el paraíso, es que en el cielo cantaremos, y alabaremos, es decir, tendremos un grupo de oración carismático sin fin. Si pasaremos la eternidad alabando y cantando al Señor, entonces debemos comenzar a prepararnos aquí en la tierra. Cada grupo de oración es como una pequeña muestra de lo que tendremos en el cielo.


enfermedad dentro
Otra enfermedad emocional es el complejo de inferioridad, el primero es el sentimiento de rechazo. Surge a partir, tal vez, de las comparaciones que los padres suelen hacer: “no eres tan bonito, inteligente, bueno… como tu hermano” pero recuerda que en la Biblia está escrito: “Puede una madre olvidar a su hijo, pero aunque así sea, yo nunca te olvidaré” es decir, Dios nos dice que estamos siempre, siempre en sus pensamientos. A veces nosotros mismos nos  sentimos inferiores, debemos recordar ahí, lo que está escrito en el libro del Génesis: “imagen y semejanza de Dios” ¿Cómo hemos de tener este complejo siendo que somos imagen del propio Dios?

Otra enfermedad emocional es el complejo de culpa. No puedo sentir que seré castigado por Dios, que no iré al cielo. Este complejo de culpa normalmente afecta a consagrados, sacerdotes, religiosas, religiosos. Saben lo que dice la Palabra: “el acusador está día y noche acusándonos ante Dios“, y recordemos también lo que la Palabra dice, que el “Señor no vino para condenar  sino para salvar
Dios dice: “perdonaré los pecados de mis hijos“, esto significa que Dios nos ve como a sus niños, y como niños, nosotros debemos tener confianza en nuestro “Papito” Dios no nos ve como adultos, siempre nos ve como a sus hijitos, por eso él perdona nuestros pecados, e inclusive los olvida.

Otra enfermedad emocional es el miedo. Miedo del castigo de los padres, de otras personas. Recordemos que la palabra dice innumerables veces “No temas“, inclusive se lo dijo el Ángel Gabriel a María. Por eso debemos saber que el miedo es señal de poca fe, pues cuando creemos en la Palabra, tenemos fe en ella, en lo que Dios nos dice en ella, no podemos temer, pues es una orden de Dios, “No teman
Otra época de nuestra vida que necesita de sanación interior, es nuestra infancia. De niños absorbemos tanto malas como buenas experiencias, porque estamos con el corazón abierto, por eso es necesario que los padres cuiden de sus niños, debido a esta sensibilidad de ellos.

Obtengan la confianza total de sus hijos, si ustedes se enojan demasiado con sus hijos cuando ellos se sinceran y cuentan algo equivocado que hicieron, no les reten, sino que escúchenlos, y llamen la atención de ellos, pero con delicadeza y amor. Otra cosa, es ser presencia, no dejen a sus hijos con extraños. Mi madre nunca estaba ausente, aunque tal vez, se encontraba un poco lejos, pero nunca totalmente ausente. Otra cosa que les digo es, cuiden lo que sus hijos comen y o beben, no les digo que desconfíen de todo el mundo, pero sí les digo que estén atentos.

Mi madre siempre me decía: “nunca comas o bebas algo, antes de orar, aunque sea una breve oración” por eso, protejan a sus hijos diciéndoles esto mismo.
Otra época de nuestra vida, es la de la pubertad  y adolescencia. En esta época, suelen ocurrir pérdidas familiares. Con frecuencia, vemos el fenómeno de los chicos que viven sólo con un padre, o con una madre, y esta ausencia de uno de ellos, es irreparable. A veces uno de los padres encuentro orto compañero, otra compañera y abandonan el hogar. Cada niño necesita de una madre y toda niña necesita de un padre, cada uno necesita padre y madre, cualquier otra cosa que es diferente a esto, no es de Dios, es del demonio. A veces el padre está muy ausente, porque trabaja lejos, viene sólo de vez en cuando y se convierte en un extraño en la casa. Otra posibilidad es que el padre es alcohólico. Uno de los mayores dolores que sufren los chicos, es el de la violencia del  padre alcohólico, que engendra miedo en  ellos. A veces en esta época, sufren también violación sexual, que pude ocurrir por parte de una autoridad: un médico, un profesor, un pariente como un tío, un primo, un hermano, inclusive el padre. Esto a veces lleva al hábito compulsivo de masturbación, que al casarse,  no les permite vivir en plenitud su matrimonio, y sienten vergüenza hasta de confesar este pecado, sólo en un retiro de sanación interior, abren su corazón y se abren a la sanación.

Por eso, necesitamos tanto de oración de sanación interior a lo largo de las diferentes etapas de nuestra vida. El Señor puede traer sanación en nuestra juventud y en el estado de vida.

Padre Rufus Pereira
Retiro de sanación y liberación
fuente Portal Canción Nueva en español

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