Vivamos lejos del pecado,
apartados de toda maldad, de toda corrupción,
pues la venida de Jesús es imprevisible!
Y Él quiere que seamos fervorosos en nuestra fe.
no podemos dejar que los nuestros se pierdan, porque la muerte está ahí para todos nosotros,
tanto para los viejos como para los más jovenes.
Tenemos que orar por nuestros hijos que necesitan volver a Dios.
Hoy, el Señor, está más cerca que ayer!
Precisamos preparar la venida de Él, anunciar sin miedo Su llegada.
Lo importante es morir en Cristo!
Una fuerza nos empujará hacia lo Alto y, así,
estaremos para siempre con el Señor.
Es la gloria de aquellos que pertenecen a Él!
Esa es nuestra vocación.
Hablemos, sin miedo y sin cesar, de la segunda y definitiva venida de Cristo en medio de nosotros.
Vivamos, cada día, la gloriosa venida del Señor.
Juan preparó la primer venida de Jesús.
Nos toca a nosotros preparar la segunda!
Tu hermano,
Mons. Jonas Abib
Fundador Comunidad Canção Nova
Adaptación del original en português.
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