Controla la ansiedad con la confianza en Dios
Me gusta ver fotos antiguas e intentar recordar la ocasión en que fueron tomadas, pensar lo que estaba viviendo en ese momento y hacer un paralelo sobre lo que cambió desde entonces hasta hoy. El otro día vi una de esas fotos que me hizo reflexionar sobre un asunto: cómo me preocupaba por cosas innecesarias. Era el bautismo de una sobrina, hace quince años. En la foto estaban casi todos alegres, relajados, y vueltos con ternura para aquel pequeño ser vestido de blanco que se acababa de volver cristiano por las aguas del bautizo. Yo al contrario, aparezco en la foto tan tensa que hasta mi frente está arrugada. Comencé a pensar si habían razones para estar así, tan preocupada y recordé que ese día me pidieron ayudar a ubicar a las personas en la foto, solo eso.
Tips para controlar la ansiedad
O sea: yo me preocupaba demasiado por cosas extremamente innecesarias, las fotos me lo recordaron. Y si me preguntas si hoy continúo preocupándome con las cosas la respuesta es si! Pero en una proporción menor, pues he aprendido a confiar más en Dios y mientras voy creciendo en la confianza, disminuyo en la preocupación. En realidad, una de las cosas más dificiles en la vida son las preocupaciones que tenemos. Sea con nuestros hijos, nuestros amigos, nuestro esposo(a), el trabajo, y otras tantas cosas que hacen parte de nuestra vida. Pero dígame, ¿quien hasta ahora ya pudo resolver alguna cosa a partir de la preocupación?
Bien sabemos que el hecho de preocuparnos no resuelve nada y en realidad lo que más queremos en esta vida es dejarnos de preocupar, solo no sabemos cómo hacerlo. Aún sabiendo que tal vez mañana nos hayamos olvidado de cuales eran las preocupaciones de hoy y conscientes de que nuestra vida puede dejar de existir en cualquier momento. Aún así nos parece imposible hacer que nuestra mente viva tranquila sin preocuparse. De ahí viene la cuestión: al final, ¿será que existe algo que podamos hacer para preocuparnos menos y dar un basta a la ansiedad? Leyendo los escritos del Padre Henri Nouwen, descubrí que existe una solución. El explica que si de verdad no podemos cambiar lo que sea, por el hecho de preocuparnos, el remedio es entrenar nuestro corazón y nuestra mente en el sentido de no perder tanto tiempo y energía con rumiaciones de ansiedad y nos muestra el camino recordando las palabras de Jesus “Buscad en primer lugar el Reino de Dios y su justicia y todo lo demás vendrá por añadidura.” Mt 6,33.
Comprendí con eso, que mientras más me lanzo en la confianza en Dios y priorizando la acción de Su reino en mi vida, más serenidad experimento aún en medio de luchas, y transmito también a los otros. Este cambio está registrado claramente en mis fotos como pude percibir en el album de mi familia. Cómo es interesante mirar nuestra historia y percibir lo mucho que Dios nos va moldeando por la fuerza de su gracia. ¿Ya te detuviste para pensar sobre eso? Deseo que en el día de hoy el Señor también te visite y fortalezca tu confianza en él, concediéndote más serenidad y alegría en el vivir el día de hoy como lo que es: Un gran regalo de Dios.
¡Estaré unida en oración!
Dijanira Silva
Misionera de la Comunidad Canción Nueva
Misionera de la Comunidad Canción Nueva
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